10 cosas que todo universitario debe hacer antes de graduarse

Aunque no seas aficionado a los deportes, no pienses que esto no es para ti. La mayoría de las universidades se esfuerzan mucho por conseguir que acuda a los partidos el mayor número posible de estudiantes: descuentos en las entradas, asientos fantásticos, fiestas en los estadios, etc. La lista es interminable. ¿Por qué? Los equipos aprecian que los estudiantes estén ahí fuera, haciendo ruido y alborotando y animando a los jugadores. Es una buena excusa para reunirse con amigos, pintarse la cara y desahogarse animando al equipo de tu escuela. No sólo es divertido, sino que también te hará sentir más unido a la escuela y seguro que te llevas unos cuantos recuerdos.

Una de las mejores partes de la universidad es que te da la oportunidad de explorar y descubrir lo que te gusta. Por desgracia, ese momento de autodescubrimiento no va a llegar mientras te desplazas por Instagram a las 2 de la mañana. Los clubes no sólo te dan la oportunidad de aprender algo nuevo, o de desarrollar un interés o afición ya existente, sino que es una de las mejores formas de hacer amigos. No te preocupes por sentirte un poco incómodo al principio, todo el mundo se siente así. Incluso si te presentas sólo para aprender sobre codificación, aviones, libros o lo que sea, seguro que harás un amigo sólo por estar cerca de gente que hace exactamente lo mismo que tú. Es una oportunidad única, que desgraciadamente no es tan frecuente en el mundo real, así que aprovéchala mientras puedas.

Lo sabemos, no es lo más emocionante del mundo, ¡pero en el futuro nos lo agradecerás dentro de unos años! Recuerda que hay vida después de la universidad, y cuando estés solicitando tu primer trabajo "de verdad" y te pregunten por cualquier experiencia relevante vas a desear haber seguido nuestro consejo aquí. Las prácticas no sólo son una forma estupenda de familiarizarte con el trabajo que quieres, sino que también te enseñan cosas como la etiqueta en la oficina y te dan la oportunidad de establecer contactos profesionales. El mundo es muy competitivo: ¡date la mejor oportunidad posible de triunfar!

Nadie puede triunfar por sí solo, y tener al mayor número posible de personas de tu lado te va a ayudar mucho a la hora de buscar futuros trabajos. Tener a un profesor que responda por ti, ya sea como referencia laboral o para escribir una carta de recomendación si piensas ir a la escuela de posgrado, es una gran ventaja que no todo el mundo tiene. Dar ese primer paso no tiene por qué ser dramático. De hecho, te recomendaríamos que simplemente te presentaras al principio de la clase, y que luego les enviaras un correo electrónico preguntándoles si puedes quedar con ellos en horas de oficina. Allí, cuéntales cuáles son tus objetivos profesionales y educativos, y mira a ver si están dispuestos a echarte una mano. ¡Probablemente te lleves una grata sorpresa!

Si eres una de las muchas personas que pidieron préstamos estudiantiles para pagarse la universidad, empieza a pensar en pagarlos cuanto antes. Hay una razón muy sencilla por la que es mejor no dejar pasar esos préstamos: durante tu época de estudiante, el Departamento de Educación de EE.UU. pagará los intereses mientras estés matriculado al menos a media jornada. Esto es enorme, ya que los intereses de los préstamos estudiantiles pueden llegar a ser bastante elevados. Cuanto más pagues ahora, menos tendrás que preocuparte en el futuro, algo que tu cuenta bancaria agradecerá enormemente.

¿Sabes cuál es una de las cosas más increíbles de la universidad? Tienes literalmente cientos de empleados, profesores y tutores que pueden ayudarte con cosas que son bastante difíciles de hacer por ti mismo. Como sabes que vas a necesitar un currículum sólido en el futuro, más vale que te pongas a trabajar en él ahora. Antes de ir al centro de servicios profesionales de tu universidad, lleva tu lista de habilidades, experiencia (el voluntariado también está bien) e información de contacto. Son unas horas que te ahorrarán un enorme dolor de cabeza en el futuro.

Para algunos, los compañeros de piso son una necesidad, para otros los compañeros de piso son una obligación. Incluso si eres el tipo de persona que prefiere su propio espacio, te recomendamos encarecidamente que durante tus 4 años vivas en una casa o apartamento con al menos otra persona. Vivir con otra persona no es tan fácil como lo pintan las películas y los programas de Netflix: hay mucho que hacer entre bastidores. Aprender a organizar un horario de limpieza, la disposición de las habitaciones y compartir el espacio es extremadamente importante y algo que probablemente harás en algún momento una vez que te establezcas en una relación duradera. Tómate este tiempo para aprender a vivir con otra persona, y descubre el tipo de personas con las que te gusta vivir, así como con las que no.

Cuando la gente dice viajar a algún lugar en el contexto de hablar de la universidad, la mayoría asume que se refiere a estudiar en el extranjero. Aunque te recomendamos encarecidamente que vayas a un país extranjero durante al menos un semestre en la universidad (es muy divertido y extraordinariamente educativo), no tienes por qué ir tan lejos. Deberías disfrutar de esta libertad recién descubierta que tienes, e incluso simplemente hacer un viaje por carretera es una empresa que merece la pena. Viajar con amigos en la universidad es mucho más fácil que viajar siendo adulto: nadie tiene que preocuparse de trabajos, familias u otros compromisos. En este momento de tu vida, ¡sólo deberían ser amigos los que salieran a la carretera!

No pretendemos sonar como tu abuelo cuando hablamos de las redes sociales, sabemos que son importantes y tienen montones de ventajas. Sin embargo, es importante recordar que, como en todo, la moderación es la clave. Hay mucho que hacer en tu campus, como ya puedes deducir de esta lista, depende de ti salir ahí fuera y aprovecharlo. Aunque no te estamos diciendo que borres tu perfil y tires el teléfono al estanque local, te sugerimos que un par de noches a la semana dejes el teléfono y veas lo que hacen los demás.

¡Prueba algo nuevo! Sabemos que esto suena supercliché y que ya nos estamos acobardando, pero tenemos que decirlo de todos modos: la Universidad es el momento de descubrir quién eres realmente. Aprovecha este momento para aprender algunas cosas sobre ti: tus intereses, lo que te gusta, lo que no te gusta, el tipo de gente con la que te gusta estar y qué tipo de persona quieres ser. No esperamos que lo entiendas todo cuando te gradúes -la vida es un viaje constante de autodescubrimiento-, pero con todas las oportunidades que tienes en el campus, explorar es más fácil que nunca. Así que sal ahí fuera y prueba algo que nunca pensaste que harías. ¿Quién sabe? Puede que te cambie la vida por completo.